Superposición y decoherencia


Para entender este concepto de la mecánica cuántica voy a explicar el experimento de la doble rendija. Si en la trayectoria de un haz de electrones y una pantalla interponemos una placa a la que le hemos hecho una hendidura, en la pantalla los electrones proyectarán dicha hendidura.



Si la placa que interponemos tiene dos hendiduras en vez de una, los electrones proyectarán un patrón de interferencias porque se han comportado como ondas en vez de como partículas (o corpúsculos).

 

Si disparamos los electrones de uno en uno en vez de en un haz, el patrón resultante debería de no dar interferencias y sin embargo lo hace. Lo que ocurre es que el electrón pasa por las dos rendijas a la vez de modo que se interferencia consigo mismo. Esto ocurre porque el electrón no sigue las leyes físicas clásicas sino las cuánticas y se encuentra en superposición, es decir, que adquiere todos los estados (posición, velocidad, dirección, espín, etc.) que le son posibles a la vez. 

  

Pero lo más curioso se da cuando mediante un detector intentamos averiguar por cual de las rendijas pasa el electrón. Este da un patrón corpuscular en vez de interferencias. Esto se debe a que el electrón, a causa de que vamos a interaccionar con él en el futuro pasa por una sola de las hendiduras.


 
Esto se debe a que el electrón también está susperpuesto en el tiempo y por que las partículas subatómicas siguen las leyes de la física cuántica hasta que interaccionan entre si y adquieren las leyes clásicas. A esto se le llama decoherencia, cuando las partículas se vuelven decoherentes y existen en un solo estado. Si no existiera la decoherencia sucederían sucesos sinsentido como el caso del gato de schrödinger donde un gato dentro de una caja con un mecanismo de liberación de cianuro dependiente de la desintegración nuclear de un átomo hace que el gato esté a la vez vivo y muerto.

El universo sigue las leyes de la física clásica gracias a las interacciones, de modo que puede fluir el tiempo, existir objetos concretos, que se den sucesos irreversibles, etc. Debido a la radiación de fondo, la radiación residual del Big Bang, que se encuentra en todas las zonas del universo ninguna partícula puede permanecer en su estado cuántico mucho tiempo porque interacciona con dicha radiación.

Existe una teoría sobre lo que les sucede a los estados superpuestos que desaparecen al volverse decoherente una partícula con un estado único. La teoría dice que esos estados no se destruyen sino que se conservan como la energía, carga, inercia, etc. pero lo hacen en universos alternativos. Lo que sucede con la decoherencia es que los estados superpuestos se segregan en universos alternativos que se generan en dicho momento. Un hipotético dado cuántico al ser lanzado e interaccionar con la mesa daría seis universos, el nuestro y cinco más donde el resultado en puntos sería diferente.

Otro fenómeno que se da como consecuencia de la superposición es el entrelazamiento entre partículas. Si cuando el electrón pasa a la vez por las dos hendiduras interaccionamos con el que pasa por la derecha y lo hacemos decoherente, el de la izquierda también lo hace. Esto significa que de una partícula ahora tenemos dos y que aunque se alejaran dichas partículas a años luz de distancia antes de interaccionar con ellas, cuando lo hiciéramos con una de ellas la otra respondería igual de forma instantánea. Por lo que existiría una fuerza a distancia de entrelazamiento entre partículas gemelas.

Este tema es realmente apasionante y nos puede parecer que roza la magia y que no puede ser real pero lo cierto es que usamos la física cuántica constantemente en el láser, la telefonía móvil, los ordenadores y la electrónica digital.